Vino submarino: Envejecimiento del vino bajo el agua

La crianza subacuática está siendo un furor en los últimos años, aunque hay bodegas que llevan décadas dedicándose, estudiando y perfeccionando esta emocionante técnica de envejecimiento. Una vez que pruebas un vino submarino te das cuenta de que no hay nada que se le pueda comparar.

Te daremos más detalles, pero podemos decirte desde ya que es uno de esos regalos con los que vas a triunfar siempre.

¿En qué consiste el envejecimiento del vino bajo el agua?

El vino submarino es aquel que han sido envejecidos bajo el mar. Es decir, una vez que el vino ha sido embotellado es trasladado a un punto determinado en el que es sumergido en el mar. Su proceso de maduración tiene lugar de una forma parcial o total en dichas condiciones.

La profundidad a la que son situadas las botellas de vino para su crianza es un factor muy importante. Esto se debe a que de ella dependerá que la calidad del vino se vea perjudicada o no por los movimientos de las corrientes.

Un detalle muy a tener en cuenta es el del tapón de la botella. Como imaginarás, el vino no debe entrar en contacto con el agua salada del mar en ningún momento. De modo que el corcho de las botellas se protege por medio de un sello de lacre, así se evitan filtraciones.

Para retirarlo bastará con golpearlo con un cuidado, retirar los restos y extraer el corcho. Sin embargo, algunas bodegas apuestan por un método más práctico como son los tapones de cristal.

Pero vamos a reconocerlo, el lacre le da más encanto, ese toque de descubrimiento arqueológico que eleva la experiencia y caracteriza a los vinos submarinos.

Y aunque creas que es difícil encontrar estos vinos submarinos, no es tan extraño. De hecho, puedes encontrarlos en el mismo Amazon.

Características de los vinos submarinos

Las particulares cualidades organolépticas del vino submarino es el que le hace tan apreciado y lo diferencia de los de crianza tradicional. La principal ventaja que tienen es que su maduración es mucho más rápida, pero lo mejor es que, aún envejeciendo a mayor velocidad, los vinos no pierden sus propiedades.

La razón se debe a las condiciones de presión, temperatura y luz en las que maduran los vinos submarinos, consideradas como idóneas por los enólogos.

En lo que respecta a la primera, la presión a la que se sitúan las botellas logra que las corrientes sean muy ligeras, de modo que no afectan negativamente ni estropean al vino. Al contrario, el movimiento acompasado y suave de las aguas marinas es beneficioso. Por otra parte, la temperatura del vino es estable y de en torno a 14 grados, y la luz que recibe, escasa.

Tal y como adelantamos, la crianza de vinos submarinos se lleva a cabo tanto de forma total como parcial. Es decir, algunas bodegas someten a sus vinos a una crianza al estilo conservador en barricas antes de terminar el envejecimiento en botella, esta vez en el mar.

El vino submarino suele envejecer bajo el mar entre seis y doce meses, incluso más.

Pero, ¿imaginas cómo será un vino submarino que haya pasado dos siglos en las profundidades? En 2008, gracias a un pescador y sus redes ya encontraron la respuesta.

Se trató del descubrimiento de una botella de vino intacta de 1813 de un naufragio. En plena guerra de la Independencia Española, un barco inglés acabó bajo el mar frente al delta del Ebro, un hallazgo arqueológico increíble. Y, por si fuera poco, entre los restos del naufragio encontraron una botella de vino, parte de su cargamento, perfectamente sellada e intacta.

Incluso se pudo analizar su contenido, perfectamente conservado, y se averiguó que se trataba de un Fondillón. Un vino muy apreciado por reyes y grandes personalidades de la alta sociedad del momento.

Las bodegas de España de vinos submarinos

En España contamos con varias bodegas que son fantásticas representaciones de lo que es un verdadero vino submarino y de primera calidad. Pero posiblemente la más famosa sea la bodega Crusoe Treasure, ubicada en la Bahía de Plentzía, en Vizcaya. Disponen tanto de tintos como de blancos de alto nivel y potentes matices.

Bodegas Carchelo también es otra de las que más éxitos acumulan en nuestro país. Situada en Jumilla, sus vinos submarinos se sumergen en las aguas del litoral mediterráneo, a cuarenta metros de profundidad. Por no hablar del impresionante diseño de sus botellas, que incluso fue galardonado con un premio nacional.

Otra muestra nacional es la bodega de Eladio Piñeiro, que envejecen sus vinos en el mar de la Ría de Arousa, en la tierra de las Rías Baixas. Les representan sus artesanales vinos submarinos blancos, de la variedad de uva albariño. Reconocidos y valorados incluso a nivel internacional.

Las bodegas de vinos submarinos más famosas del mundo

Por supuesto, fuera de nuestras fronteras también hay grandes vinos submarinos que catar de algunas de las bodegas más famosas del mundo. Por un lado, está la bodega italiana Bisson, que sumerge sus botellas en la costa de Génova.

Y si decidimos mirar hacia otro continente, en Estados Unidos tienen una buena representación con la bodega Mira Winery y su vino submarino de la bahía de Charleston, en California. Así como la bodega Viña Casanueva de Chile, que envejece sus vinos en el Océano Pacífico y se especializa en tintos de uva pinot noir con unas notas impresionantes.

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Catar un vino submarino es toda una experiencia para los sentidos, sobre todo en el caso de aquellos que llegan directamente a tus manos con alguna cocha todavía pegada en el vidrio. Sin duda, una opción fantástica para hacerte un merecido autoregalo o para disfrutar en compañía.